Porque sí, es verdad que me asustan los silencios que interpreta como malos.
Hoy estoy aquí, muriendo de vida otra vez.. y qué hago con ésto? No puedo estar semibien, semimal.. estoy y eso debería ser razón suficiente para vivir.. Hoy hablé de felicidad a un corazón que necesitaba escucharlo, y ¿qué le di de mi? Dudas, porque ni yo misma sé el concepto de mi felicidad. Se trata todo del miedo de definir, limitar, delimitar, delinear algo que siento que es muy grande y no lo quiero resumir en tan poco como un par de lineas. Hablé de felicidad y confesaba mis miedos, con el corazón en altavoz y desnuda en un escenario imaginario.
Miedo. Dolor. ¿Dé qué me sirven ambos en la búsqueda de mi palabra, de mi concepto infinito de felicidad? y si la encuentro y me encuentro con que es un concepto no convencional...¿el miedo atacaría de nuevo?
No es el temor a encontrar mi palabra en donde sé que está, que no me busca porque me espera y casi casi la puedo saborear, es la incomodidad de pensar en una comodidad normal de temer a un concepto no convencional ni familiar, y conformarme con el miedo de saberme en una felicidad infeliz que haría sonreír a cualquier ser humano..
(?)._.
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